martes, agosto 14, 2007

La Caridad Rentable

Hace tiempo que el concepto de caridad perdió su sentido como valor y se convirtió en un significante vacío, en un logo de fácil venta y publicidad.
Hoy la Caridad se ofrece, vende y compra como un producto. Ya no se adquiere ni se enseña como un valor humano y social. Se ha materializado en carteles, en pulseras fluorescentes de colores, en chapitas, y en costosas y lucrativas campañas publicitarias.
El caso de la Corporación del Niño Agredido muestra el lado más oscuro y extremo del "negocio" en que se ha convertido la Caridad.
Detrás de muchas campañas solidarias -no sólo desconocidas sino también algunas muy internalizadas en el colectivo- existen enormes intereses económicos, publicitarios y políticos involucrados.
Muchas cruzadas solidarias están hechas en favor de dichos intereses particulares -de quienes las publicitan, organizan, financian o dirigen- y no para quienes supuestamente fueron creadas.
El Logo de venta fácil
La Caridad se vuelve un negocio lucrativo en Chile debido a un factor esencial, su excesivo sobrevaloración en el discurso imperante y su concepción profundamente errada como valor y forma de acción.
Debido a lo anterior, la caridad se vuelva "La" forma de acción e intervención social y erróneamente reemplaza a la Política Pública, de Estado y a la Reforma profunda, efectiva y proyectable en el tiempo, a nivel social.
Por lo tanto, se estima equivocadamente, que la caridad puede solucionar los problemas sociales profundos como la pobreza, la drogadicción, los campamentos, u otros problemas, como el abandono de los menores. La Beneficencia es confundida con las Políticas Públicas y la Responsabilidad Social.
La gente, las empresas y los gobiernos, creen que la beneficencia puede poner fin a los campamentos, a la pobreza y una serie de problemas que aquejan nuestra sociedad.
Olvidan que ésta es sólo un paliativo, que construir una mejor media-agua no acabará con los campamentos, mientras esas familias y esos hijos, no reciban una educación y un trabajo que les permita romper las redes de pobreza.
Coherentemente con el discurso de la Caridad Rentable, quienes podrían cambiar todo eso, apelan y siguen apelando a la beneficencia como primer y único recurso.
Entonces, se hace muy fácil vender la caridad, publicitarla y lucrar a través de ella, porque se apela a un discurso internalizado y naturalizado. No se puede cuestionar ni criticar la caridad, aunque nos huela mal, aunque se sepa inefectiva, aunque sea sólo un placebo.
Y surgen los programas de ayuda, Hola...Aló, Buenas tardes...que publicitan mucho sus acciones, pero cuya proyección y efectividad en el tiempo son muy bajas.
¿Por qué ocurre esto?
Porque se apela al egocentrismo e individualismo del sujeto, para que diga: "Soy solidario, tengo mi pulsera fluorescente. Ya hice mi parte...nada más que hacer, estoy contento y satisfecho conmigo mismo".

9 comentarios:

Lucho dijo...

¿La caridad es inefectiva? ¿De dónde viene eso?

Jorge A. Gómez Arismendi dijo...

La Caridad proviene de una concepción específica de lo que era la limosna, muy arraigada en algunas sociedades, que varía según lo que Weber consideraría como la base ética de las sociedades.
La Caridad y la solidaridad no son malas, al contrario son valores sumamente valiosos, pero su concepción sobrevalorada, en muchos casos es errada y eso las hace inefectivas y poco proyectables.
¿Acabamos con el hambre repartiendo comida...? ¿Pero por cuánto tiempo?
Como dice el refrán, no des pescado enseña a pescar...y le agregaría, y entrega una buena caña y no dejes que uno solo se lleve todos los pescados...

Lucho dijo...

No veo como una "concepción sobrevalorada(?)" la hace inefectiva...

De todas maneras tienes razón en que ese tipo de caridad no soluciona problemas de largo plazo. Pero ese es sólo un tipo de caridad.

Caridad como la que hace Bill Gates, construyendo centros educacionales por el mundo, si produce cambios de largo plazo.

Javier Bazán Aguirre dijo...

En una sociedad abierta, uno puede denunciar cuando los tipos malos de cualquiera institución, ya sea privada o pública, abusa. Ahora bien, al denunciarlo, uno puede dejar de aportar.
El último párrafo estoy en desacuerdo, pues uno cuando dona o aporta, lo hace por egoísmo no como tú lo entiendes. Del mismo modo, si un hombre tiene su mujer enferma, es porque él necesita de ella. La cuida y la lleva al hospital por egoísmo.

Javier Bazán Aguirre dijo...

La Caridad no resuelve el problema de la pobreza, pero en algo ayuda.

Javier Bazán Aguirre dijo...

Tú mismo lo has dicho. No se les enseña a pescar, sino a recibir pescado. Pero, ¿acaso esa no es la base del Estado de Bienestar?
De acuerdo a tu comentario, también habría que borrar 'el emprendimiento social' tan de moda en Chile, el cual es propuesto y praticado por el polo 'progresista', como si el emprendimiento no tuvviese una función social al dar trabajo y ofrecer productos y servicios.

Anónimo dijo...

La caridad... Basura de los ricos.. Y miseria de recepción para un pobre... Creo que la caridad es una mierda, tal cual. Le quita responsabilidad a los deberes del estado y "limpia" gratuitamente las conciencias de los capitalistas!!!... Hasta cuándo aguantar tal trato!!
Basta con la "caridad"... Así no se construye ni se sensibiliza a la gente, sino, la vuelve más irresponsable...

Verónica dijo...

La caridad y la ayuda social. Buen tema.

Creo que no hay que olvidar a aquellas instituciones que sí ayudan y se desloman tratando de conseguir financiamiento.
Eso sí, una vez el profe de RRPP nos decía que cuando una entidad posiciona y liga tan bien su labor como el Hogar de Cristo, por ejemplo, nadie se atreve a cuestionarla o pedirle que rindan cuentas con la plata de los socios y voluntarios. No estoy diciendo que esta institución sea como la de los chantas del niño agredido (al contrario. Es más: yo soy socia), pero cito el ejemplo que dio el profe ya que con el graficó que nunca jamás tendemos a desconfiar en casos así y mira el pastel que salió a la luz pública ahora con los chantas que decían ayudar a niños y ancianos.

Creo que en tu comentario lo dices todo: "la Caridad y la solidaridad no son malas, al contrario son valores sumamente valiosos, pero su concepción sobrevalorada, en muchos casos es errada y eso las hace inefectivas y poco proyectables".

Yo soy voluntaria de hartas cosas, y hay que estar adentro para darse cuenta de que falta mucho. Insisto: la frase tuya explica muy bien lo que tratas de dar a decir.


besos.

Daniel de Witt dijo...

Jorge, 100 % de acuerdo.
En muchos casos, la mayoría, se hacen obras de caridad para lavarle la cara a un sistema excluyente. Se busca humanizar un sistema que es deshumanizante por definición.
Un abrazo.