miércoles, febrero 06, 2008

Primarias en USA: Presidenta mujer o Presidenta de color

En las próximas elecciones en Estados Unidos, se plantea un dilema coyuntural profundo para ese país, donde las elecciones por primera vez colocan en posibilidad de acceder al poder máximo a representantes de dos sectores históricamente marginados en la Política estadounidense, las mujeres y los afro-americanos.

La prensa en USA y el resto del mundo, ha estado totalmente centrada en las últimas semanas en las primarias demócratas entre Hillary Clinton y Barack Obama, dejando en segundo plano las decisiones en el Partido Republicano, por una razón muy simple, porque hay una candidata mujer y un candidato de color.

No se trata en este sentido, de recalcar que Clinton es mujer en sentido misógino, o que Obama es de color en sentido racista, sino de mostrar que las elecciones primarias, por primera vez dan la posibilidad de acceder al poder a miembros de dos sectores históricamente –aunque distintamente- marginados en la Política estadounidense, las mujeres y los afro-americanos.

Sin embargo, la mayoría de los analistas se han centrado en aspectos comunes como la popularidad, el prestigio político o la trayectoria de ambos candidatos, pero pocos han considerado los aspectos de género y raza que cada uno lleva detrás de sí como fuertes cargas simbólicas.

En cuanto a la presencia de las mujeres en la política, al igual que en la mayoría de los países como Chile o Argentina, en Estados Unidos, el campo político ha estado más bien controlado por los hombres, quienes no sólo controlan el habitus de éste, sino que todo el capital social disponible.
Por lo mismo, las mujeres tradicionalmente han sido relegadas a un plano más bien protocolar, pero han sido claramente despojadas de la toma de decisiones –esto no implica que cumplan funciones importantes en algunos casos como el de Condoleezza Rice-.

En este sentido, Hillary Clinton es quizás la primera en romper la lógica de la primera dama, cuya función pasiva se relacionaba con aspectos más bien protocolares. Durante el gobierno de su marido, asumió una posición mucho más activa e influyente, que incluso se vio fortalecida después del caso Lewinsky. Después de eso, dejo de ser la esposa de y se convirtió en Hillary (se apropio de parte del habitus y capital político de su marido).

En el caso racial, el tema es más complejo quizás, puesto las comunidades afro americanas, sufrieron una exclusión más profunda que la sufrida por las mujeres blancas en cuanto al poder, debido a la segregación racial que imperó en Estados Unidos hasta finales de la década de los 70´, bajo la doctrina de "separados pero iguales" que en definitiva legalizaba el racismo.

Bajo este marco institucional formal e informal, era impensado que ciudadanos de estadounidenses de color, accedieran a cargos administrativos y de poder. Menos aún pensar que alguno fuera precandidato de alguno de los partidos hegemónicos.

En este sentido, la pre candidatura de Obama, marca el fin de una hegemonía blanca, no explícita en la política estadounidense, y su elección como presidente implicaría la abolición definitiva del lema “separados pero iguales”.

1 comentario:

Javier Bazán Aguirre dijo...

Si a Obama lo apoya Jimmy Carter, creo que la hará un gran daño a ese país.